Los fuertes son más dúctiles, esa blandura les permite recibir el influjo de las voluntades de otros, uniendo.
Suma que agrega los complementos, para lograr cualquier acción, sin infringir la naturaleza de nadie... y los inseguros se acercan poco a poco.
Los fuertes saben cuando es el tiempo, para establecer vínculos, de acuerdo a las leyes internas, sin desesperar por las puertas cerradas.
La organización social se construye, en la comunidad de intereses, en la que cada miembro se sienta parte integral y vital del todo, dando lo mejor de sí.
Nada puede quedar unido, con meras palabras sagaces, sino a través de las fuerzas interiores, que atraen con mayor energía al éxito.
Guarda lealtad al fuerte, de un modo recto, porque así como en las vasijas de barro, se cocinan los alimentos, en la solidaridad se crean las obras.
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